Asturias, nuestro lugar de relax y fuente de inspiración
Hoy os traemos un paseo cargado de inspiración por nuestra querida Asturias, uno de esos destinos que reconfortan el alma, donde parece que el tiempo se hubiera parado, con mil rincones donde descubrir y contemplar la naturaleza en estado puro.
Un lugar en el que huele a campo en cada rincón gracias a su vegetación exuberante, plagada de altos arces, robustos castaños, eucaliptos gigantes y helechos que parece que crecen por generación espontánea… Un paraíso donde el sonido de los cencerros acompañan los paseos con su singular melodía…
Estas vacaciones en familia, en la cima de Cué (una preciosa aldea a pocos minutos de Llanes) descubrimos un camino de ensueño repleto de «plantas silvestres», maravillosas y pobladas hortensias que invaden cada sombra. ¡Qué flores tan bonitas y delicadas! Las hemos visto crecer durante todos los veranos desde que éramos niñas y no dejamos de admirarlas. Llegaron a Europa en el siglo XIX para quedarse y decorar con sus preciosos colores estas zonas de climas templados.
Al final de este idílico camino encontramos un lavadero de aguas cristalinas que bajan de la montaña donde parece escucharse las voces de las mujeres de la aldea, que hasta hace poco, subían a intercambiar las noticias del día a día.
Su artesanado de madera es una auténtica joya y los muros de piedra lo convierten en un marco que parece haber sido sacado de un cuento.
Y como no podemos evitar llevarnos todo a nuestro terreno, hoy os queremos contar que las hortensias y las bodas nos parecen un tándem maravilloso, en ramos, arreglos florales para decorar mesas y rincones, con moderación combinándolas con otras flores o como flor principal para llevarse todo el protagonismo.
Pero también para decorar un rincón de tu casa con hortensias secas que nos recuerden cada día las bonitas y relajadas jornadas de verano. Porque si algo realmente bueno tienes estas flores es que resultan igual de bonitas frescas como secas.
Y para secarlas lo único que tenéis que hacer es ponerlas boca abajo en un lugar con poca luz.
¡Así de sencillo y de evocador! ¿Quién se apunta?
*Fotos via: Tu Decoración Original